No se concibe un Madrid sin terrazas donde tomar una cerveza o refresco para aliviar los calores veraniegos. Sin embargo, la costumbre de que muchos bares y otros tantos restaurantes saquen sus mesas a la calle se ha extrapolado también, al invierno. Así que, desde hace algún tiempo, se puede tomar un café al aire libre en cualquier época del año.
Las primeras terrazas que se instalaron en la calle donde la gente comía y bebía, entonces solo en verano, fueron las de los cafés París y Francia, situadas en el Pasaje de Matheu que une la calle Espoz y Mina con la calle Victoria. Eran mediados del S. XIX y estaban situadas una enfrente de la otra.
El origen de sacar mesas de los establecimientos de hostelería a la calle procede de Francia y rápidamente se extendió por toda nuestra ciudad. Los paseos o bulevares eran muy propios para acoger estos nuevos lugares de esparcimiento, como las situadas, por ejemplo, en el Paseo del Pintor Rosales o en el Paseo de Recoletos.
Más información en Madrid curioso, de Mª Isabel Gea.