Es la calle Escalinata la que está entre la Plaza de Isabel II (Ópera) y la calle Mesón de Paños. En un primer momento fue conocida como la Cava de la Puerta de Guadalajara porque coducía a dicha puerta que estaba situada en la calle Mayor.
Después pasó a llamarse calle de las Fuentes porque conducía a las fuentes de los Caños del Peral. Una vez desaparecidas dichas fuentes y jardines quedó en este lugar un profundo barranco, lo que favorecía a los malhechores. Razón por la que se hizo necesario el establecimiento de una empalizada de madera.
Posteriormente fue conocida como calle de los Tintes, nombre que se debía a Francisco Cañizares, tintorero de Felipe III. En 1835 se dividió en dos calles que tomaron los nombres de Escalinata y Mesón de Paños, por un lado, y Bonetillo, por otro; nombres que se mantienen en la actualidad.
Su denominación actual se debe a la escalinata o escalera de piedra que se tuvo que construir para poder acceder desde la calle a la plaza de Isabel II, tras la construcción de ésta, pues la calle se había quedado con la rasante primitiva y la plaza quedó ocho metros más alta.
Más información en Los nombres de las calles de Madrid de Isabel Gea Ortigas.