Ahora que se aproximan las vacaciones estivales para los niños es un buen momento para planificar excursiones cerca de Madrid. Hoy os proponemos descubrir o redescubrir -para quienes todavía no lo conozcan- el Valle de la Fuenfría.
El itinerario comienza junto a un puente y una calzada históricos, remonta suavemente las laderas del valle rodeado de un magnífico bosque y arroyos de agua fresca y finaliza en unos miradores de roca cargados de poesías. Un plan inmejorable que hará las delicias de los más pequeños.
Uno de los valores más destacables del valle de la Fuenfría es el maduro bosque de pino silvestre, uno de los mejores conservados de la Sierra de Guadarrama. En nuestro recorrido también encontraremos numerosas especies de aves (como herrerillos o chochines), aves de presa (como el águila calzada y el azor) o carroñeros (como el buitre leonado) volando sobre nuestras cabezas.
Otro de los aspectos más relevantes de este paseo es el tramo de calzada romana que unía -hace casi dos mil años- la ciudad de Segovia y Titulcia y atravesaba la sierra de Guadarrama aprovechando el puerto de la Fuenfría que queda entre las elevaciones de Montón de Trigo y Cerro Ventoso.
En el destino de nuestra ruta, el Mirador de los Poetas, encontraremos grabadas en las piedras de granito las poesías de numerosos autores que hacen referencia a la montaña. Luis Rosales, poeta y vecino de Cercedilla, da nombre a la plataforma que sirve de mirador. Allí mismo encontraremos una trampilla con libros de literatura a disposición del paseante y también un cuaderno donde poder dejar reflajadas nuestras impresiones.
Más información en «Excursiones para niños por la sierra de Madrid» de Javier Zarzuela Aragón.